«Abrimos en Panamá porque necesitábamos crear confianza»

Dos décadas avalan la experiencia de esta empresa astigitana dedicada a la manufactura del vidrio plano. Su apuesta por el mercado exterior y las nuevas tecnologías le ha colocado a la cabeza del sector en Andalucía

05 nov 2017 / 07:27 h - Actualizado: 05 nov 2017 / 11:21 h.
"Empresa familiar","Marcaje al empresario"
  • El director general de Astiglass, Manuel Aliaga, en las instalaciones de Écija. / El Correo
    El director general de Astiglass, Manuel Aliaga, en las instalaciones de Écija. / El Correo

sevilla

{Astiglass empezó hace más de veinte años, pero sus orígenes están en un pequeño taller. ¿Cómo nació la empresa?

—Astiglass fue creada por mi padre en el año 1993, tras una dilatada experiencia previa en el sector del vidrio. En los primeros años de actividad, el mercado en el que desarrollaba su actividad estaba limitado a Andalucía, ofreciendo productos de calidad, elaborados mediante procesos poco automatizados. Desde pequeño acompañé a mi padre en la cristalería, hasta que en el año 2003 se produjo un relevo generacional y asumí la dirección de Astiglass. Desde ese momento la empresa comenzó a desarrollar importantes inversiones que nos permitieron situarnos a la cabeza del sector del vidrio en Andalucía. En el año 2008 inauguramos nuestras actuales instalaciones donde en un espacio de 25.000 metros cuadrados incorporamos líneas de producción para la realización de forma automatizada de todo tipo de manufacturas de vidrio plano, comenzando una expansión en ventas y en nuevos mercados que nos ha situado en la posición actual.

—¿A qué se dedica exactamente Astiglass?

—Manufacturamos vidrio plano. Desarrollamos procesos de corte, canteado, mecanizado, templado y laminado de vidrio. Somos fabricantes de doble acristalamiento. Nos hemos especializado en la fabricación de productos especiales, en base a sus características térmicas, acústicas, de seguridad o estéticas, y todo ello en grandes formatos que pueden alcanzar hasta 6 por 3,21 metros.

—¿Quiénes son sus principales clientes?

—Nuestros principales clientes son constructoras e ingenierías de fachadas, que apuestan por productos exclusivos y con altas prestaciones. También estamos muy presentes en constructoras especializadas en el montaje de cadenas de establecimientos comerciales y hoteles.

—¿Qué trabajos destacaría de toda la trayectoria de la compañía?

—Son muchísimos los proyectos en los que hemos participado. Recientemente hemos finalizado el Centro Botín en Santander, los interiores del nuevo Hotel de la Torre Sevilla, el Centro Comercial Nevada, en Armilla (Granada), y las entradas del metro de Granada. Además realizamos el suelo de vidrio pisable de la T4 del Aeropuerto Adolfo Suárez. Fuera de España estamos realizando la Ciudad Hospitalaria de Panamá y el Centro de Convenciones Amador, dos proyectos de gran relevancia a nivel internacional.

—A finales de 2016 hicieron una gran inversión en maquinaria, ¿cómo les ha ayudado en este último año?

—Hemos finalizado varias inversiones para que toda la fábrica pueda manufacturar vidrio en 6 por 3,21 metros. Las principales incorporaciones fueron una línea de impresión digital mediante tinta cerámica sobre vidrio y un horno de templado dotado de los últimos avances tecnológicos y de herramientas que permiten una alta eficiencia energética. Estas inversiones nos han diferenciado notablemente de otras empresas del sector, apoyando nuestra evolución hacia productos diferenciados por sus características técnicas. La finalización de esta nueva fase de inversiones nos ha permitido estar presentes en nuevos mercados internacionales, pudiendo ofertar nuestros vidrios en cualquier proyecto de relevancia que se prevea construir.

—Cuentan con una filial en Panamá. ¿Cuándo desembarcaron y por qué?

—Desde el 2013 tenemos una delegación comercial a través de la cual mantenemos los proyectos en toda Latinoamérica. Decidimos tener presencia física porque necesitábamos invertir en confianza y elegimos Panamá debido al desarrollo inmobiliario que estaba desarrollando en ese momento. La decisión fue un acierto porque desde allí hemos podido desarrollar ventas por toda Latinoamérica.

—¿A qué otros países exportan?

—En América, tenemos clientes en Estados Unidos, República Dominicana, Costa Rica, Perú, El Salvador, Paraguay y Bolivia, y estamos realizando gestiones en Colombia, México y Chile. Dentro de la Unión Europea trabajamos con Portugal, Francia, Alemania, Reino Unido, Luxemburgo y Bélgica. También estamos presentes en Marruecos.

—¿Pesa más el mercado internacional que el nacional?

—Sigue siendo más importante el nacional, pero el crecimiento lo lideran los mercados internacionales. El año pasado nuestra cifra de exportación superó el 30 por ciento, pero si contamos las ventas a clientes nacionales que exportan nuestra mercancía, el porcentaje podría superar el 50 por ciento.

—¿Cuáles son las previsiones de crecimiento para 2017?

—Este año prevemos crecer un 30 por ciento en facturación.

—¿Cuánto empleo genera la empresa?

—En la actualidad somos 115 personas en plantilla, es el máximo histórico de la sociedad.

—¿Les afectó la crisis?

—Nos afectó de forma directa, pero la empresa, lejos de encogerse y de echar freno, encontró la solución en abrir mercados y apostar por nuevas inversiones en tecnología.

—¿Se nota la recuperación de la construcción?

Es una recuperación tímida, no termina de definirse. No obstante, aunque el crecimiento de Astiglass se ha centrado en los mercados internacionales, las ventas a nivel nacional también comienzan a incrementarse.

—¿Por dónde pasa el futuro de la empresa?

Astiglass necesita incrementar su capacidad de producción para ganar competitividad en los mercados en los que trabaja, por lo que estamos planificando nuevas inversiones que nos permitirán aumentar los formatos en los que ofrecemos nuestros productos y acercar los puntos de producción y de instalación de los mismos. ~