Pasajes de la historia de Sevilla

La cripta oculta en el Patio de Banderas

Seguramente, en muchas ocasiones, habrá pasado por el Patio de Banderas, junto a los Reales Alcázares, y pisado el albero de la misma desconociendo que tras ese bello entorno escoltado por naranjos y aroma a azahar pisa, realmente, una vieja construcción con siglos de antigüedad

28 ene 2022 / 04:21 h - Actualizado: 27 ene 2022 / 11:21 h.
"Pasajes de la historia de Sevilla"
  • La cripta oculta en el Patio de Banderas

Así es, bajo el falso suelo de albero se esconde un yacimiento arqueológico muy importante, un punto en el que se marca, quizás, el fin y utilidad de la zona desde hace milenios.

Se sabe que Sevilla está ocupada desde el siglo VIII a.C. -incluso antes-, de aquel tiempo poco queda pero si de culturas que han ido llegando, poco a poco, hasta nuestra ciudad.

Allí, en el Patio de Banderas, a 5 metros de profundidad, encontramos vestigios de esas culturas, de un edificio romano del siglo I a.C., que tiene muros de hasta 3 metros de altura realizados con la llamada técnica púnica del «opus africanus» y que pudieron ser -hipótesis- parte de unos almacenes portuarios o relacionados con una edificación mayor que bien pudiera haber sido una fortaleza.

Se ha conocido que se reestructuró en esa misma época hasta que quedó en el olvido en el siglo IV d.C., aunque esta edificación tuvo diferentes épocas y destrucciones.

Según los expertos, como Miguel Ángel Tabales, podría haber una relación con un centro de culto, aunque se precisaría del hallazgo de restos funerarios en esta cripta tan singular como desconocida en Sevilla. En relación a ello se identificado partes construidas sobre las ruinas de un antiguo templo paleocristiano, con contrafuertes, estribos y una probable bóveda, hasta su destrucción en el siglo XI.

La parte más antigua, se ha podido conocer que pudo ser un fondo de cabaña con restos de lo que era una cocina del siglo VIII a.C., de final de la Edad de Bronce siendo de las primeras evidencias del origen de la ciudad, también se encontraron restos de cerámica.

La zona fue estudiada en 1976 por el arqueólogo Manuel Bendala Galán cuando se encontraron restos arquitectónicos de la referida basílica paleocristiana.

Es posible que exista una cámara o sótano más abajo, tal vez parcial, en función de los estudios y la disposición en paralelo de tres naves -al menos- y un pasillo con diferentes niveles de pavimento.

En el año 426 sufre su primera destrucción cuando los vándalos asaltan la ciudad, de esta época se encontraron 30 monedas y un crismón que se atribuye al obispo Marciano. Luego se edificaría un edificio visigodo con contrafuertes exteriores y un estribo interior, alguna especie de abovedamiento y recinto toral que podría tener correspondencia con la iglesia de San Vicente, de gran antigüedad y uno de los primeros templos paleocristianos de la ciudad.

Es la cripta desconocida del Patio de Banderas que merece ser parte del recorrido visitable de nuestra ciudad.