El futuro de Paco Chaparro como entrenador del Betis está bajo sospecha, más que nunca, después de que el Málaga propinase a su equipo la cuarta derrota consecutiva. Y empiezan a sonar técnicos y el trianero, mientras tanto, asiste a su peor momento en Heliópolis. Los números negativos se le acumulan uno detrás de otro.
El puesto de entrenador del Betis, ahora propiedad de Paco Chaparro, puede estar en el mercado más pronto que tarde porque el fútbol no entiende de otra circunstancia que los resultados y los del conjunto verdiblanco, al margen de su buen juego y de pésimos arbitrajes, son nefastos desde hace casi dos meses. El trianero no gana en la Liga desde el 23 de noviembre y esta crisis, la peor que se le recuerda en todo su mandato, puede resultarle muy nociva. Hombres como Víctor Fernández o Fernando Vázquez, ambos afines a Manuel Ruiz de Lopera, empiezan a sonar en los mentideros balompédicos, sin olvidar al responsable del filial, José María Nogués, como solución intermedia.
Los datos más preocupantes para Chaparro son de sobra conocidos. El primero es que su Betis acumula cuatro derrotas consecutivas, récord negativo suyo. El segundo es que en total son seis jornadas sin ganar, lo cual supone igualmente el peor registro de Chaparro en una sola temporada (acumuló once entre el final de la 07-08 y el principio de la 08-09). En este mismo curso, el equipo ya atravesó otras dos rachas de cinco partidos sin triunfo (jornadas 1ª-5ª y 7ª-11ª).
El caso es que el Betis está padeciendo la peor racha de la Liga, junto al Mallorca, que también ha sumado uno solo de los 18 últimos puntos. El Espanyol, por ejemplo, ha obtenido tres puntos en ese parcial, y el Getafe y el Valladolid van ya por tres derrotas seguidas pero antes lograron más puntos que el Betis. El 1-2 ante el Málaga, además, hace que el Betis lleve el doble de derrotas (10) que victorias (5). Y en casa ha perdido sus dos últimas comparecencias (Athletic y Málaga), con lo que se queda a una derrota de su récord absoluto en Primera.
La marcha del Betis, y con ella el futuro del entrenador, también resulta muy preocupante si se mira el dato fundamental: los puntos. Lleva 18 en 18 jornadas, así que no hay que ser matemático para calcular que su promedio es de un punto por partido. Huelga decir que, como siga así, no alcanzará los 42 ó 43 en que normalmente se cifra la salvación, pero hay más. A pesar de que el juego y la posición es mejor que otros años, la realidad es que en puntuación va igual que la pasada campaña y ojo, lleva cuatro menos que en el último descenso. Y la primera vuelta no tiene mucho remedio, porque en el mejor de los casos, ganando al Valladolid, sumaría 21, igual que en la 07-08; hizo 18 en la 06-07, 19 en la 05-06 y 23 en la 99-00.
Para colmo de males, al Betis le aguardan ahora dos partidos fuera de casa (Valladolid y Huelva) y en el primero de ellos no contará con su pichichi, Emana. Y después, el Getafe... y el Tourmalet. Hace seis jornadas sacaba ocho puntos al descenso; ahora lo tiene a tres. Le urge reaccionar.
