Protestas masivas en 80 ciudades italianas contra la guerra en Gaza con altercados en Milán

Decenas de miles de italianos han salido este lunes a la calle en 80 ciudades de Italia para pedir al Gobierno de Giorgia Meloni de romper relaciones con Israel y que Italia no sea "cómplice" del "genocidio" del país hebreo contra la población palestina. Con este preámbulo, la movilización, masiva pero no suficiente para bloquear el país —ya que fuera de las zonas de protesta la vida transcurría con normalidad—, logró lo que nunca antes: dar visibilidad, por primera vez a los contrarios en Italia a la guerra contra Palestina.

En Roma, familias, estudiantes, trabajadores de distintos sectores, sindicalistas, e incluso un grupo de bomberos marcharon en una protesta totalmente pacífica y de ambiente festivo que se desarrolló en los alrededores de la estación de Termini, que quedó en parte bloqueada durante varias horas. De igual manera, los estibadores, uno de los gremios últimamente más activos en denunciar la presencia en las costas italianas de buques que transportan armas a Israel, bloquearon los puertos de Génova y Livorno. Y, en distintas partes del país, también pararon los transportes ―salvo los aeropuertos, que han quedado fuera de la movilización―, la sanidad y diversos centros educativos, especialmente las universidades.

En Italia "se siente con fuerza la necesidad de bloquear las actividades, para protestar contra el genocidio en curso en Gaza, contra las complicidades del Gobierno Meloni con el Estado de Israel, para detener la guerra y la carrera armamentista", había explicado al principio de la jornada USB, el pequeño sindicato organizador de la protesta (que, por el contrario, no contó con presencia de los principales partidos ni de otros grandes sindicatos).

Escaramuzas

La única nota gris: escaramuzas con la policía en Bolonia y Milán, ciudad donde primero -en la mañana- algunos inconformes quemaron banderas de EEUU e Israel y después -ya en la tarde- se produjeron puntuales enfrentamientos con las fuerzas del orden cuando algunos de ellos intentaron romper el cordón de la policía y entrar en la estación de la ciudad. Finalmente, los incidentes se saldaron con una decena de manifestantes detenidos y alrededor de 60 miembros de las fuerzas del orden y 12 manifestantes heridos, de los cuales al menos 23 tuvieron que ser trasladados al hospital, según medios locales.

Unos episodios, estos, han servido al Gobierno para arremeter contra toda la movilización. "No es con la violencia, agrediendo a las fuerzas del orden, bloqueando autopistas, estaciones y puertos como se ayuda a la población civil palestina", ha dicho el ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani. "Indignas las imágenes que llegan desde Milán: supuestos propalestinos, supuestos antifascistas, supuestos pacifistas que devastan la estación y generan enfrentamientos con las fuerzas del orden. Violencias y destrucciones que nada tienen que ver con la solidaridad y que no cambiarán en lo más mínimo la vida de las personas en Gaza, pero que tendrán consecuencias concretas para los ciudadanos italianos, que acabarán sufriendo y pagando los daños provocados por estos vándalos", ha añadido la primera ministra Meloni.

Creciente malestar

La incógnita es, sin embargo, cómo la mandataria italiana esquivará este creciente malestar en la sociedad italiana, cuando además sondeos internos indican que el rechazo a las operaciones israelíes en Gaza se está convirtiendo en un fenómeno que cada vez más involucra en Italia a personas de distintas tendencias políticas. Meloni, de hecho, se ha mantenido hasta ahora totalmente alineada con EEUU, negándose también al reconocimiento del Estado palestino. 

La movilización se ha producido después de otra, realizada el pasado viernes, cuando diversas ciudades italianas —entre ellas, Roma, Milán y Catania en Sicilia— fueron escenario de marchas también para denunciar "el genocidio" de Israel en Gaza, en una convocatoria hecha por la CGIL, el mayor sindicato italiano.

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