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SEMANA SANTA

Concepción Rubio, nueva hermana mayor de La Paz: "Asumo el cargo con normalidad, yo no tengo techo de cristal"

Tras el fallecimiento del hermano mayor de la hermandad de El Porvenir, Manuel Recio, su compañera en la junta tomará posesión del cargo este jueves a las 20.30h en la parroquia de San Sebastián

Concepción Rubio durante una jura de hermanos de la Hermandad de La Paz.

Concepción Rubio durante una jura de hermanos de la Hermandad de La Paz. / Hermandad de La Paz

Rocío Soler Coll

Rocío Soler Coll

No ha sido como ella esperaba. Sin elecciones de por medio, y sin una candidatura premeditada. Este jueves, Concepción Rubio, hasta ahora teniente de hermano mayor en la actual junta de gobierno de La Paz, se convertirá en hermana mayor de la hermandad a la que lleva sirviendo desde que tiene 16 años. Las reglas sostienen que es ella quien adopta el cargo tras el fallecimiento inesperado de quien ha sido hermano mayor este último año, Manuel Recio. Ahora, Rubio tomará posesión del cargo e indirectamente asumirá una nueva responsabilidad en el sector cofrade: ser la segunda mujer que afronta dicha responsabilidad en la historia de la Semana Santa de Sevilla.

Rubio llegó a la cofradía de El Porvenir cuando tan solo era una niña. En 40 años ha atesorado infinitos recuerdos asociados a esta corporación que, insiste, tanto le ha dado. Por ello, su implicación en el devenir de la hermandad es incuestionable. Su profesión como profesora titular en la Facultad de Economía la compaginó con su cargo como diputada de Caridad entre 2012 y 2015, asumió la mayordomía durante ocho años, entre 2016 y 2024, y el 19 de julio de 2024 juró su papel como teniente de hermano mayor hasta este verano.

Concepción Rubio durante una jura de hermanos de la Hermandad de La Paz.

Concepción Rubio durante una jura de hermanos de la Hermandad de La Paz. / Hermandad de La Paz

PREGUNTA. ¿Se imaginaba siendo hermana mayor algún día?

RESPUESTA. Siempre he dicho que la ilusión de ser hermano mayor de tu hermandad tiene que tenerlo todo miembro de junta. Otra cosa es que las circunstancias familiares y profesionales puedan ser o no las más adecuadas. Mis circunstancias ahora mismo me lo permiten, si convocáramos elecciones, porque así lo exigieran nuestras reglas, ahora sí me presentaría. No hay mayor honor.

P. Este jueves tomará posesión del cargo en la Parroquia de San Sebastián. ¿Cuáles son los principales retos que afronta la hermandad en los próximos tres años?

R. El principal reto es hacer el nuevo palio de la Virgen de la Paz, que está en el taller de Manuel Solano. A partir de este septiembre el taller tendrá casi dedicación plena a nuestro palio. En estos momentos, se están haciendo las piezas repetidas en la estructura y las esculturas, como las cabezas de los santos. Este es nuestro proyecto más grande, pero también estamos inmersos en impulsar un proyecto social propio, este era un objetivo personal de Manuel, que además de ser hermano mayor, también era mi amigo. Lo haremos de la mano de la Casa Amigo y de Cáritas Parroquiales, con el Proyecto Lázaro. Vamos a ser una extensión de Cáritas dedicado a personas sin hogar que no tienen un lugar donde asearse, ducharse y cuidar su higiene. Era algo que siempre habíamos querido tener pero era difícil.

No quiero creer que el hecho de ser mujer pueda intervenir en algún sentido

Y si me preguntas a mí, otro de los claros objetivos es la formación religiosa de los jóvenes, que creo que es esencial. Es un reto propio, quizás porque soy profesora de universidad y para mí los jóvenes son importantísimos. Tengo claro que sin formación, la Semana Santa se queda vacía para mi gusto. En una ciudad como Sevilla hay muchísimas herramientas para fortalecer nuestra formación espiritual: el arte, la naturaleza, la música... A través de todas estas cosas podemos ver a Dios y creo que es una manera más cercana y dinámica para los jóvenes. Cuando mi padre fue hermano mayor su junta de gobierno era muy joven y estaban todos muy unidos, entonces entendí la importancia de estos hermanos.

P. Se ha convertido en la segunda mujer Hermana Mayor en Semana Santa. ¿Cómo lo afronta?

R. Sinceramente, no quiero pensarlo. No quiero creer que el hecho de ser mujer pueda intervenir en algún sentido, prefiero obviarlo totalmente porque quiero normalidad. He estado en distintos cargos en varias juntas de gobierno y tengo un recorrido muy largo. Ayudar no sé si ayuda, pero en mi hermandad, los cuatro hermanos mayores con los que he estado en junta de gobierno me han tratado con total normalidad.

El principal reto es hacer el nuevo palio de la Virgen de la Paz, que está en el taller de Manuel Solano

Si te soy sincera, asumo el cargo con normalidad y yo voy a actuar con normalidad porque no tengo techo de cristal.

P. En las fotografías que hizo el Consejo de Hermandades aparece usted como la única mujer rodeada de hombres de otras juntas. ¿Qué opina sobre la representación femenina en las juntas de gobierno de las hermandades de Sevilla?

R. Tenemos que tener mucho apoyo familiar y las familias lo tienen que entender. En mi caso, mi marido y mis hijos siempre me han apoyado mucho y creo que eso cada vez le ocurre a más mujeres. Por eso creo que cada vez habrá más mujeres en las juntas porque está cambiando su papel en la hermandad. Aunque es cierto que la etapa más plena de una mujer, entre los 30 y 50 años, es cuando muchas están formando una familia y eso ha sido siempre un impedimento. Además, para qué ocultártelo, los horarios de las hermandades son criminales.

P. Su padre fue hermano mayor entre el 2000 y 2003 y él presentó una propuesta para que las mujeres pudieran salir de nazareno, pero no consiguió que se aprobara. En 2004 se hizo realidad y usted salió. ¿Cómo recuerda esa experiencia?

R. Fue un gran momento. Yo quería salir desde que era chica y cuando finalmente lo conseguimos nos ubicaron en el último tramo. La verdad es que sentí que mi hermandad nos cuidaba mucho y los hermanos no dejaban de preguntarnos que qué tal estábamos.

Creo que cada vez habrá más mujeres en las juntas porque está cambiando su papel en la hermandad

Solo éramos tres mujeres y cuando nos preguntaban por el cansancio yo les respondía que aguantábamos sin problemas, que era un paseo precioso.

P. En principio, le quedan tres años por delante para recordar. Hábleme de algunos de los momentos más inolvidables que ha vivido en la hermandad.

R. Son muchísimos... Pero recuerdo con especial cariño cuando fui diputada de caridad en la junta de Santiago Arenado. El día que fuimos a entregar la obra social al arzobispo, esa visita fue alucinante. Conseguimos abrir el Centro de Orientación Familiar de nuestra parroquia, de los cuatro que hay en el arzobispado nosotros mantenemos el de la parroquia de San Sebastián.

Con Manuel Muñoz fui mayordomo y recuerdo la compra de la casa hermandad, ese momento de firmar, después de todo lo que habíamos peleado, fue muy importante. En la junta de Vicente Flores, firmamos el nuevo palio y jamás olvidaré ese cabildo de hermanos, donde todos de forma casi unánime votamos a favor de hacer un nuevo palio. Y con Manuel Recio, mi amigo, recuerdo el momento que habló conmigo para ser teniente y también nuestra última conversación antes de que él falleciera. Estuvimos hablando sobre asuntos de la hermandad, en concreto sobre el proyecto de la obra social y que ahora vamos a impulsar a muerte porque era el proyecto de su mandato, para que su legado quede vivo.

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