Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

IGLESIA CATÓLICA

"Preguntaba con frecuencia por la Macarena": adiós al Papa que mejor entendió la devoción mariana

El Papa Francisco ha sido el Santo Padre que más rosas de oro ha otorgado a las advocaciones de la Virgen, dos de ellas en España: a la Virgen de Montserrat en Barcelona y a la Esperanza Macarena en Sevilla

"El mundo necesita mucha Esperanza": La Macarena recibe la Rosa de Oro, símbolo de una devoción universal

Rocío Soler Coll

Rocío Soler Coll

Rocío Soler Coll

"El cristiano no tiene derecho a ser huérfano, tiene madre. Una madre que no solo nos da la vida, sino que nos educa en la fe". El Papa Francisco proclamó en infinidad de ocasiones su fe en la Virgen María, algo especialmente presente por su condición de jesuita y en sus 12 años de pontificado. Este Lunes de Pascua, el Santo Padre fallecía a la edad de 88 años. Ahora, su legado brilla más que nunca en todas aquellas ciudades que tuvieron la dicha que recibir una Rosa de Oro, la máxima distinción que el Papa puede otorgarle a la imagen de la Virgen.

El Sumo Pontífice dio 13 rosas de oro a lo largo de su pontificado, convirtiéndose en el que ha entregado más en los últimos cuatro papados, desde que Pablo IV fuera el primero en dársela a una imagen mariana.

La más reciente tuvo lugar en diciembre del año pasado, cuando el Papa concedió la Rosa de Oro a la Virgen de la Esperanza Macarena, en Sevilla. Hasta la fecha, en España solo habían sido distinguidas la Virgen de Montserrat de Barcelona y la Virgen de la Cabeza de Andújar, por lo que fue la primera vez que se le confería a una Dolorosa y la última que el Sumo Pontífice entregó. Desde entonces, la imagen es reconocida como una devoción universal. Un gesto "imborrable e inolvidable" para el hermano mayor de la Hermandad de la Macarena, José Antonio Fernández Cabrero.

Un Papa devoto de la Macarena

La Rosa de Oro a la Macarena no fue el único gesto que acercó al pontífice a una de las imágenes con más devotos de la capital andaluza. "Nos consta que él preguntaba con frecuencia por la Virgen de la Esperanza", aseguraba el hermano mayor de la cofradía en una conversación con El Correo de Andalucía.

03/12/2024 Imágenes del acto de entrega de la Rosa de Oro. A 3 de diciembre de 2024, en Sevilla, Andalucía (España). La Virgen de la Macarena será distinguida este martes con la Rosa de Oro, máxima condecoración otorgada por el Papa, en un acto que se celebrará en su Basílica. Este reconocimiento, que la convierte en la primera imagen dolorosa en el mundo en recibirlo y en la tercera en España, pone en valor la devoción universal que despierta esta advocación mariana. SOCIEDAD Joaquin Corchero - Europa Press

Acto de entrega de la Rosa de Oro a la Virgen de la Esperanza Macarena. / Joaquin Corchero - Europa Press

En 2017 tuvo lugar una de las estampas que ratificaron la devoción del Papa por la Macarena. Durante una audiencia general en Roma, el Santo Padre recibió la medalla de la Hermandad de la Macarena y una fotografía de la Virgen de la Esperanza en su besamanos de la parroquia del Sagrario con motivo del 50 aniversario de su coronación canónica. Fue el padre Domenico Baccelliere, oficial de la primera sección de la Secretaria de Estado de la Santa Sede y sacerdote de la diócesis de Acerenza en Italia, quien le hizo entrega de estos regalos a Su Santidad en nombre de la junta de gobierno de la corporación.

La Rosa de Oro a la Macarena fue la primera vez que se le confería a una Dolorosa y la última que entregó el Papa

Allí, tal como aseguraron fuentes de la hermandad, al entregarle los regalos al Papa Francisco y decirle que querían ser un signo de la devoción que la hermandad de la Macarena tiene hacia el sucesor de Pedro, el Santo Padre contestó: "Gracias, yo soy devoto de la Virgen de la Esperanza".

Sevilla se convirtió en e tercer territorio español en recibir tal distinción después de Andújar y Barcelona. En abril de 2015, durante la visita del entonces alcalde de Sevilla a El Vaticano, Juan Ignacio Zoido contó que el Papa Francisco le dijo que Sevilla era "la tierra de María Santísima".

Las otras vírgenes a las que el Papa distinguió

Desde 2013 hasta 2024, han sido 13 las vírgenes veneradas con una Rosa de Oro del Papa Francisco. La primera fue la Virgen de Guadalupe, que ya había sido distinguida 50 años antes por el Papa Pablo VI. La popularmente conocida devoción del Papa Francisco por la imagen mexicana la convirtió en la primera en recibir la máxima distinción del Papa.

El Papa Francisco recibiendo una imagen de la Esperanza Macarena y una medalla de la Hermandad de la Macarena.

El Papa Francisco recibiendo una imagen de la Esperanza Macarena y una medalla de la Hermandad de la Macarena. / Hermandad de la Macarena

Dos años después llegó el turno de Nuestra Señora del Cobre en Cuba y el año de la JMJ en Cracovia reconoció a Nuestra Señora de Czestochowa. Su cuarta entrega fue para la Virgen de Fátima en 2017, tal como ya habían hecho Pablo VI en 1967 y Benedicto XVI en 2010. También distinguió a Nuestra Señora de la Antigua (Panamá) y a Nuestra Señora de Csíksomlyó (Rumanía) en 2019. Tras la pandemia, en 2021, la primera Virgen venerada fue Bienaventurada Virgen María de los Dolores de Šaštín, patrona de Eslovaquia, Nuestra Señora de la Altagracia de la República Dominicana y la Virgen del Rosario de Chiquinquirá (Venezuela) en 2022.

Solo en 2023 el Santo Padre otorgó tres rosas de oro: a la Virgen de Ta’Pinu (Malta), al icono de la Virgen Salus Populi Romani, en la basílica de Santa María la Mayor (Roma) y a la Virgen de Montserrat (Barcelona). La Virgen de la Esperanza Macarena fue la última en coronarse con la Rosa de Oro el año pasado.

La consternación ante su muerte

El Papa era especialmente querido entre las Hermandades y Cofradías de la capital andaluza. Fruto de su estrecha relación con el entonces arzobispo Amigo Vallejo, fue un "gran impulsor" del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular, también conocido en Sevilla como La Magna.

Por ello, los hermanos mayores de las hermandades no han tardado en mostrar públicamente su consternación tras la noticia del fallecimiento del Papa el pasado lunes. "Perdemos a un Papa con un sentido acentuado de lo que es salir de las periferias, de lo que era la ecología y de ir donde no habían ido nunca otros papas. Ese es el gran legado de Su Santidad", decía Fernández Cabrero.

El también jesuita José María Rodríguez Olaizola escribía este lunes en la página web de la Pastoral de la orden jesuita su agradecimiento a la labor del Papa: "Ha alentado la misericordia primero, y la esperanza después. Y ambas son muy necesarias en este tiempo implacable y derrotado. Porque ha sido profético en su clamor por la paz".

Tracking Pixel Contents