Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

TEMPORAL

Las AMPA de Sevilla reprochan a la Junta que no cancelara las clases durante el temporal: "Es intolerable"

Este miércoles cayeron 115 litros por metro cuadrado en las primeras 15 horas según los datos de Emasesa, y aunque las universidades cancelaron sus clases durante el medio día, la Consejería de Educación no suspendió las actividades extraescolares

Temporal en Sevilla

Temporal en Sevilla / Alejandro Godino

Rocío Soler Coll

Rocío Soler Coll

"¿Cómo puede ser que con aviso naranja en Sevilla nadie en la Consejería de Educación alerte a la comunidad educativa del riesgo de llevar a nuestros hijos e hijas a los centros educativos?". La plataforma Escuelas de Calor, formada por 200 AMPA, ha emitido un comunicado denunciando la gestión del temporal de la Junta de Andalucía. La de este miércoles no fue una tormenta más, cayeron 115 litros por metro cuadrado en las primeras 15 horas según los datos de Emasesa. El último registro similar data de 1997, hace 28 años, y lo daba la AEMET: 109 litros por metro cuadrado.

La intensa tormenta sembró el caos en Sevilla, las calles parecían ríos, los garajes se inundaron, los desagües estaban a su máxima capacidad y la sirena de las ambulancias no dejaba de sonar. Fueron más de 228 los avisos que recibió el 112 a lo largo de todo el día en la capital. Fueron 25 litros por metro cuadrado solo en la peor hora de la tormenta.

La Consejería de Educación sostiene que "las decisiones dependen de los niveles de alerta que va estableciendo la Aemet, y que traslada a Emergencias". Por ello, al no decretarse en ningún momento el nivel de alerta roja -que es cuando se cancelan las clases- la cartera de Carmen Castillo no emitió ningún aviso en Sevilla.

Ante este escenario, los centros educativos no recibieron ninguna indicación para suspender las clases ni las actividades extraescolares. Las clases, como cada día, comenzaron entre las 8 y 9 de la mañana, en aquella franja horaria llovía de forma moderada pero ya estaba prevista una alerta naranja durante el día. No fue hasta las 12 cuando la tormenta llegó a su punto más intenso.

Las clases finalizaron a las 15h y en aquel momento algunas calles ya se estaban inundando. Universidades como la Pablo de Olavide o la Universidad de Sevilla enviaron sus mensajes de suspensión de clases a media mañana. Sin embargo, Educación decidió que las actividades extraescolares de los colegios e institutos siguieran adelante.

Algunos centros con los que pudo hablar este periódico contaron sus situaciones "extremas": sótanos inundados, clases con goteras y accesos imposibles. A pesar de que no había orden de suspender actividades, algunos centros se vieron obligados a mandar un mensaje a los padres pidiendo que no se desplazaran porque no había acceso al colegio o que las clases se cancelaban porque las aulas estaban inundadas. Los centros tuvieron que decidir de forma autónoma ante un escenario de caos y peligro provocado por la lluvia.

Tal como ha podido saber este periódico, la Delegación de Educación del Ayuntamiento de Sevilla está visitando aquellos colegios con zonas afectadas para calibrar las afectaciones estructurales y los daños. "Desde primer hora han estado atentos a las emergencias de los colegios", sostienen desde algunos centros.

En su comunicado, Escuelas de Calor denuncia que la Consejería no cancelara la jornada lectiva ante un aviso naranja, algo que "puso en riesgo a los escolares y a sus familias por acudir a centros nada preparados para fenómenos meteorológicos extremos y por desplazarse para recoger o llevar a los menores".

"Ante la falta de previsión y planificación, este miércoles fueron miles las familias que tuvieron que salir -si pudieron- de sus trabajos o domicilios para recoger a sus hijos, con el consiguiente agravio del caos de tráfico y poniendo en riesgo su seguridad y la de los demás. Esto es intolerable", señalan en el escrito.

La asociación alerta de que "estos fenómenos extremos de lluvia y viento, como las olas de calor, van a ser cada vez más frecuentes por el cambio climático en que nos encontramos inmersos", por ello, desde las familias exigen que se actúe cumpliendo responsable y rigurosamente "con las obligaciones y competencias que tienen quienes nos gobiernan pensando en la seguridad de nuestra comunidad educativa".

Tracking Pixel Contents