Energía

Ribera afirma que la Unión Europea planteará sanciones al gas natural licuado ruso "de forma inmediata"

Rusia es el tercer país de origen de las importaciones de gas natural a España con un 20% del total

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, comparece en la Comisión de Transición Ecológica, en el Senado, a 30 de abril de 2024, en Madrid (España).

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, comparece en la Comisión de Transición Ecológica, en el Senado, a 30 de abril de 2024, en Madrid (España). / Ricardo Rubio - Europa Press

Sara Ledo

Sara Ledo

La llegada de gas natural licuado (GNL) ruso a España podría tener los días contados. Dos años después del comienzo de la guerra de Ucrania, la Unión Europea valorará de forma inminente la posibilidad de sancionar el GNL ruso, según ha avanzado la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, en su intervención durante la Comisión del ramo del Senado.

“Nuestra capacidad de intervención para prohibir la importación de GNL ruso no existe salvo que paguemos el contrato que están obligados a rescindir. Pero sí existe la capacidad de adopción de medidas sancionadoras por parte de la Unión Europea y, de hecho, este es un asunto que probablemente se plantee de forma inmediata. Si es así, sí podemos intervenir prohibiendo esas importaciones”, ha afirmado Ribera.

Según ha avanzado ‘Político’, la Comisión Europea prepara un nuevo paquete de sanciones contra Rusia que podría incluir restricciones a la carga de GNL en los principales puertos europeos, que son España, Francia y Bélgica. Este sería el decimocuarto paquete de sanciones dirigido a Rusia desde que comenzó la guerra de Ucrania y el primero que aborda el gas.

Bruselas ha impuesto una prohibición total al carbón ruso, así como al petróleo crudo y productos refinados como la gasolina o el diésel. Pero no al gas. En parte, debido a la enorme dependencia de algunos países del nordeste de Europa con el país que dirige Vladímir Putin. Si bien la situación actual es muy distinta a la de hace dos años por la diversificación forzosa a la que se vio sometida el continente después de la invasión de Rusia en Ucrania.

La proporción de gas ruso por gasoducto en las importaciones de la UE cayó de más del 40% en 2021 a alrededor del 8% en 2023, según datos de la Comisión Europea. En el caso del gas de gasoducto y el GNL combinados, Rusia representó menos del 15% del total de las importaciones de gas de la UE.

Por otra parte, el Parlamento Europeo ratificó a mediados de abril una nueva normativa que debe recibir el visto bueno por parte del Consejo de la Unión Europea y que contempla la posibilidad de que los Estados miembros puedan limitar el acceso del gas ruso y bielorruso a través de gasoductos o de terminales de GNL.

Tercer proveedor

Rusia es el tercer proveedor de gas natural de España, tras Argelia y Estados Unidos, con el 20% del total de esta materia prima que llega al país. En total, en el año móvil que va de marzo de 2023 a marzo de 2024 llegaron 76.905 gigavatios-hora (GWh) de gas natural ruso, más del doble que lo que había llegado en el mismo periodo de 2021-2022. “Es un gas sobrevenido que tiene que ver con la situación de crisis que vivimos y la reexportación”, ha explicado Ribera. De hecho, en 2022 España se convirtió en el país que más gas natural licuado (GNL) reexportó en todo el mundo.

La vicepresidenta ha recordado que hasta ahora el Ministerio para la Transición Ecológica había enviado “varios requerimientos” a las importadoras de gas para “que no firmen contratos adicionales y que en la medida de lo posible vayan reduciendo los volúmenes importados en los contratos en vigor”. La principal gasista española, Naturgy, cuenta con un contrato ‘take or pay’ vigente hasta 2041 de gas natural ruso. Esto significa que está obligada a comprar una cantidad determinada porque si no lo hace se verá obligada a pagar igualmente, a no ser que hubiera una causa de fuerza mayor, como podría ser un desastre natural o que el gas ruso fuese objeto de sanciones.