Lucila en el Real Club Sevilla Golf

El Colectivo Lucila clausuró ayer una Exposición con las obras seleccionadas para esta edición

Miembros del Colectivo Lucila. Todos fotógrafos y otras cosas más. / Foto: Millán Hercé.

Miembros del Colectivo Lucila. Todos fotógrafos y otras cosas más. / Foto: Millán Hercé. / Teresa Lafita Gordillo

Teresa Lafita Gordillo

Aunque la exhibición física de las obras concluyó ayer en los salones del Real Club Sevilla Golf, todas y muchísimas más fotografías de los que han participado en esta convocatoria, pueden verse –y seguirse a los autores- en las redes sociales y páginas individuales y conjuntas de este “Colectivo”, una Asociación de artistas que no necesariamente deben reunirse para hacer las fotos, ni nada tienen que envidiar (aunque no me guste el término), a los fotógrafos profesionales, sino más bien al contrario.

Esto es así porque en esta como es otras que han organizado ya en diferentes locales, galerías y centros de Arte, hay verdaderas piezas de Coleccionismo perfectamente exponibles y adquiribles en Museos Internacionales.

Y si no quieren considerarse como tales, ejercer de Maestros de la Imagen, aunque a su pesar todos lo son, porque ponen lo mejor de sí mismos en cada instantánea que incluyen dentro de diferentes repertorios iconográficos que tratan.

Tampoco porque podrían ser especialistas: en paisajes urbanos, de montaña, desiertos, marítimos, retratos, bodegones y todo el abanico de posibilidades que la cámara o las diferentes cámaras que combinan, les permiten.

Y por supuesto, porque en las reuniones abiertas al público los segundos martes de cada mes en la Revuelta, se dan clases magistrales, o bien los que “se atreven” porque son más consagrados o tiene detrás de sí mucha experiencia, se someten a los comentarios, se debate siempre en positivo, de manera que todos sigamos aprendiendo o nutriéndonos de todos.

En realidad, cualquier fotografía –parafraseando a Apollinaire- es el encuentro casual entre una persona y una imagen que tiene por delante en un momento concreto, siempre y cuando sea rápido en captarla y siempre y cuando no sea una manipulación devenida de la I.A., del chat GPT, o de cualquier otra fuente “artificial” como el almacenamiento que supone el Big Data, y otras tecnologías que vayan entrando en nuestras vidas, en un mundo que hasta ahora se ha basado en la realidad –o en la ficción con elementos reales- ya que si se usan, a veces será muy difícil distinguirla.

Ya no se trata de megas, de “Ks”, de maneras de medir las distancias, el tiempo de apertura o exposición del obturador, si es digital o analógica,...sino de gozar de la fotografía, los encuadres, luces, ... que nos proponen.

Por eso en este grupo hay de todo: desde los que recogen una panorámica tal cual, sin postproducción alguna, o sin utilización de filtros, lentes, objetivos, consideran la densidad del papel a la hora de revelarlas, y toda la serie de cuestiones que derivan del hecho de verla en pantalla o como en esta ocasión, enmarcadas.

Para esta nueva exposición, que por otra parte ha sido el “debut” en el mundo de la gestión cultural de Marta del Valle, se ha contado con la presencia del Presidente del Club, Rafael Domínguez y bastantes de los socios de Lucila, que han participado o no, porque para exponer hay que pasar por unos criterios estéticos, compositivos, originalidad del tema y calidad lo más óptimos posibles.

Son estos: María Cotera, Luis Miguel Rufino, Humberto Ybarra. Juan Manzano, Isabel Macarro, José Antonio Zamora, Lourdes Rodríguez, Enrique Medina, Juan Jiménez, Judith Matías, Román Calvo, Ángel Ruiz Miguens, Juan Antonio Prieto, Juan Jiménez, Enrique Medina, Macarena Oviedo.

Ser fotógrafo es una manera de estar y de ser, imprime carácter a todo lo que se ve. Es una de las mejores maneras de analizar y observar el mundo, o ser observado por él. Hay muchos mundos como se ve en estas imágenes. Déjense atrapar por ellos y sigan a estos y a los que participarán en las siguientes ediciones, a través de sus convocatorias, páginas webs y allá por donde vayan con su c.