Sevilla FC

Quique y Xavi se despiden de Sevilla y Barcelona

El 19 de diciembre en Los Cármenes, el madrileño debutó con un 0-3 y en la jornada 34 ante el Granada también, certificó su objetivo

El entrenador del Sevilla Quique Sánchez Flores en el Ramón Sánchez-Pizjuán.

El entrenador del Sevilla Quique Sánchez Flores en el Ramón Sánchez-Pizjuán. / José Manuel Vidal

Álex Mérida

Álex Mérida

Se pone fin a la andadura de Quique Sánchez Flores en el banquillo del Sevilla Fútbol Club y el madrileño dirigió este sábado la última sesión de entrenamiento antes de medirse al FC Barcelona.

El colofón a cinco meses repletos de emociones, de mucho trabajo y de sacrificio terminará en el Ramón Sánchez-Pizjuán, estadio que vio la debacle final de Diego Alonso frente al Getafe.

De Los Cármenes al Granada en el Sánchez-Pizjuán

Comenzó Quique ganando en Granada el 19 de diciembre y como él mismo ha comentado en repetidas ocasiones "ganaron gracias a los jugadores" y no fue hasta principios de febrero cuando el Sevilla, gracias en parte al regreso de En-Nesyri de la Copa África, empezó a manifestar una mejoría y un plan de ruta para huir de esa tortura llamada Segunda División.

Cuando no era el marroquí, Isaac se encargaba de dejar los puntos en el Sánchez-Pizjuán y Sergio Ramos y Jesús Navas de contagiar a sus compañeros para ser un equipo. Ese fue el tramo de la estancia del madrileño que sirvió a la entidad nervionense para ir alejándose de la quimera.

Un inicio convulso y un vestuario roto en lo mental y carente de energía supo competir y enganchar buenos resultados en dos etapas con Quique en el banquillo para certificar en la jornada 34 en casa frente al Granada la permanencia tras un 3-0 ante los nazaríes y uno de los días en el que su hinchada disfrutó viendo a los suyos.

Desde entonces, el vestuario ha cambiado el chip y las vacaciones como premio a no conseguir nada se ha instalado en la cabeza de muchos integrantes. Se ha perdido la ambición: "Me habría gustado otra cosa, ha cambiado mucho la mentalidad de los grupos en la última década. Los grupos que consiguen objetivos que se hacen sobre la temporada, sean los marcados al inicio o no, los jugadores tienden a la relajación más que a la competición", reflexionaba Quique Sánchez Flores en su comparecencia previa al Barcelona.

Y ante eso el entrenador poco puede hacer, que siempre es el primero en no querer perder: "La ambición de los entrenadores no siempre se siente correspondida. Cuando hemos sido un equipo entregado al entrenamiento hemos sacado buenos resultados". 

El adiós de Quique Sánchez Flores y Xavi Hernández

Con esas declaraciones respondía a los mismos que cuando han querido han salvado la papeleta, pero esos alicientes de ayudar tras la salvación a los jugadores con retos particulares no han estado. Ni se ha ayudado a que En-Nesyri se acercara a la cresta de los goleadores, ni se ha potenciado a los internacionales con opciones a ir a Eurocopa y Copa América

Si querrán esta vez despedirse del Ramón Sánchez-Pizjuán y decir adiós a una temporada para olvidar ofreciendo ante los suyos un buen partido de fútbol sólo lo saben ellos.

Quique y Xavi, dos ajusticiados por directivas que cada vez tienen más similitudes en no creer en los que de verdad hacen pegamento, se ven las caras en Nervión. Los dos, recordados en Sevilla y Barcelona por diferentes asuntos, tienen las puertas abiertas de muchos banquillos para la temporada que viene.

El técnico madrileño no ha querido forzar a dos elementos claves del Sevilla FC como Jesús Navas y Marcos Acuña, a los que prefiere dar descanso para que lleguen con España y Argentina listos a sus compromisos internacionales. Juanlu en la derecha y Pedrosa en la izquierda, que cumplió ante el Athletic 100 partidos en Primera División, suplirán a ambos.

ha pedido jugar Gudelj, que quiere estar en la lista de Dragan Stojković e ir con Serbia a la Eurocopa. El resto de los titulares serán los mismos que en duelos anteriores.

Javier Iglesias Villanueva, ayudado desde el VAR por Pizarro Gómez, tocará el silbato por última vez esta temporada a las 21:00 horas con un Ramón Sánchez-Pizjuán manifestando su descontento con la directiva actual.

Sin nada en juego, sólo la honra de cerrar el campeonato con dignidad tras dimitir frente a Villarreal, Cádiz y Athletic, es el cometido del Sevilla en el adiós de Quique. Su homónimo en Barcelona, mal tratado y cuestionado en un Barça post Messi se marcha con una liga.

"Le daré un abrazo enorme, hablaremos, siempre nos hemos comunicado muy bien y no debería decirlo, pero qué mal tratan en el Barcelona a sus leyendas. Es una mala racha, pero qué mala racha. Primero con Koeman, luego con Messi, con Xavi ahora...". Tiene razón Quique Sánchez Flores.