Tres puntos para irse a nueve sobre el descenso (0-2)

Una tempranera roja a Saúl Coco tras agarrar a Nemanja Gudelj cuando avanzaba para encarar la portería de la UD Las Pamas, marcó el choque.

Muñiz Ruiz en el campo mostró la tarjeta amarilla, y tras instancia de Pizarro Gómez para acudir al monitor, cambió su decisión y dejó a los tres minutos a los de García Pimienta con un hombre menos sobre el campo.

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El Sevilla FC, como avisó Quique Sánchez Flores antes del partido, subió las líneas e intentó robar en la primera fase de la jugada canariona, pero no supo cuando lo hizo, culminar la misma ni intimidar los dominios de Aarón Escandell.

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De hecho, la merma de jugar con diez, no le afectó a Las Palmas, que siguió con su hoja de ruta de salir tocando y aumentar el ritmo de las acciones superada la primera línea de presión.

A los 22 minutos, un balón largo de Nyland, que fue un despeje, dejó a Isaac Romero frente a la portería de Aaron, pero el lebrijano no encontró los tres palos por abrir en demasía el disparo, que se marchó alejado del marco canario.

El Sevilla de Quique, carente de juego e ideas para combinar como de costumbre, no alteró su plan inicial y siguió con cinco atrás a pesar de jugar en superioridad.

La posesión, más repartida que de costumbre en los choques con los canarios por la desigualdad de fuerzas sobre el campo, fue inerte para los nervionenses.

Isaac, que a los 40 minutos volvió a verse las caras con Aarón tras interceptar un balón y regatear a los defensores amarillos, erró nuevamente en la definición.

No así Youssef En-Nesyri dos más tarde. El marroquí aprovechó un centro medido de Gudelj al corazón del área y cabeceó al fondo de la red.

Ni con uno más se vio a un Sevilla diferente

El guion del partido siguió su curso tras la reanudación. Una falta lejana botada por Pedrosa, que metió un pase al espacio al lebrijano, casi termina en el segundo de los de Quique, pero de nuevo al canterano sevillista se le hizo pequeña la portería y su golpeo raso salió desviado.

Aburrido y plano, el Sevilla siguió jugando a la nada, y Las Palmas cerca estuvo de darle el susto por medio de Sandro con un disparo seco desde fuera del área que se escapó cerca de los dominos de Nyland.

Repitió el punta canario con una falta lejana que sorprendió al noruego y tuvo que desviar a córner.

Los últimos compases del partido evidenciaron que el Sevilla no está para mucho más que salvarse. 87 minutos con superioridad numérica sobre el campo y no fue capaz de demostrarlo.

En el último ataque, un balón que prolonga Lukébakio lo corre En-Nesyri, que aguanta con calma antes de ceder a Agoumé, que tras un centro débil que no atrapa Aarón acaba en las botas del belga, que puso el 0-2 definitivo.

La temporada casi puede darse por finiquitada. Con las derrotas de Cádiz, Celta y Mallorca, y el empate del Rayo en casa, el Sevilla tras sumar los tres puntos se aleja de la zona baja, a nueve puntos de los amarillos (34 de los sevillistas por 25 del Cádiz), y espanta el descenso casi de manera definitiva.

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El pitido final de Muñiz Ruiz no sólo trajo aire a una temporada nefasta de los nervionenses, también alivió a los espectadores tras presenciar noventa minutos en los que pasó muy poco.