El crimen de Santa Clara tuvo su origen en una pelea previa en una discoteca

La muerte del joven de 21 años que fue apuñalado en Santa Clara en la mañana del pasado domingo tuvo su origen en una pelea previa en un local de fiesta. "Parece que es una discusión que se inicia con carácter previo en una discoteca y después en la calle se da esa situación que, lamentablemente, da como resultado el fallecimiento de este joven", ha explicado esta mañana Pedro Fernández, Delegado del Gobierno en Andalucía.

Agentes de la Policía Nacional han detenido, en menos de 24 horas, a los dos presuntos autores del homicidio ocurrido en la confluencia de la avenida Villas de Cuba con la calle Macedonia. Según han confirmado fuentes oficiales a El Correo de Andalucía, los dos detenidos son de nacionalidad española y la víctima es de origen marroquí y residente en Sevilla.

Muere un joven de 21 años apuñalado en el barrio de Santa Clara

Desde el conocimiento de los hechos la Policía Nacional inició una investigación que ha dado sus primeros frutos en la mañana de este lunes, con la detención de dos varones como supuestos autores del crimen. Hasta el lugar de los hechos se personaron tanto la Científica como Homicidios, aunque desde la Jefatura Provincial de Sevilla no han dado más detalles sobre la investigación.

Como parte de esa investigación, los agentes se afanaron en buscar el arma con la que se había producido el apuñalamiento y se ha rastreado si hay cámaras de seguridad que pudieran haber grabado lo ocurrido. 

Los testigos señalan que una pelea entre pandillas motivó el crimen de Santa Clara

El ocio nocturno, en el punto de mira

No es la primera vez que se señalan a las discotecas del Polígono Calonge y Store como una fuente de conflictos y motivan que muchos jóvenes de vuelta transiten a primera hora de la mañana. Entre las quejas de los vecinos de Santa Clara están los gritos, el escándalo de cada fin de semana y los botellones, habituales en la zona.

Algunos quieren verlo como un "hecho aislado", aunque admiten que esta zona residencial pierde la calma cada fin de semana por el tránsito de personas que acuden a los locales de ocio nocturno en ambos polígonos.

Muchos de estos residentes se muestran preocupados por sus hijos, por la llegada de personas de otros barrios al distrito, que en algunos casos cometen impunemente agresiones a menores, invaden sus lugares de ocio, obligándoles a irse. Piden más vigilancia y tienen prevista una reunión para tratar estos temas de seguridad y movilizarse en último caso.