Polémica en la Feria de Sevilla

El Ayuntamiento estudia recurrir la devolución de la caseta a la familia de Ana Rosa Quintana

Crece la preocupación entre los afectados que la perderían porque el consistorio no termina de darles una respuesta concreta

Ana Rosa Quintana y su marido, Juan Muñoz, en la Feria de Sevilla

Ana Rosa Quintana y su marido, Juan Muñoz, en la Feria de Sevilla / Europa Press

Rafa Aranda

Rafa Aranda

Incertidumbre. Esa es la palabra que sobrevuela ahora mismo por la cabeza de decenas de sevillanos, socios de las casetas de la calle Juan Belmonte 173, 175 y 177 de la Feria de Abril, después de que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) diera la razón mediante una sentencia no firme a la familia política de la presentadora Ana Rosa Quintana, los Muñoz Noguera (Juan Muñoz Támara es su marido), que pedía que le fuera devuelta su licencia tras presentar la solicitud de renovación fuera de plazo.

El Ayuntamiento de Sevilla, a quien la sentencia responsabiliza de haber inducido a error a los solicitantes por no haber comunicado los nuevos plazos por correo electrónico tras su suspensión en la Feria de 2021, debido a la pandemia, es quien tiene ahora que tomar la decisión de recurrir o no, algo que esperan los actuales socios de las tres casetas afectadas ('Ven Acá Pa Cá', 'Los Atornillaos' y el 'Círculo Juvenil Andaluz de Tebeos').

Este martes los representantes de la caseta 173, a la que de momento afecta la sentencia, se han reunido con un técnico de la delegación de Fiestas Mayores del Ayuntamiento, pero no habrían recibido ninguna respuesta definitiva. Según explica a El Correo de Andalucía Charo Jiménez, presidenta de la caseta 'Los Atornillaos', lo único que han podido saber es que "los servicios jurídicos están analizando la situación. Un poco más de lo mismo, que van a intentar arreglarlo". "Van a plantearse hacer alguna modificación en las ordenanzas municipales porque es la primera vez que pasa", añade Javier Pérez, socio de la caseta y marido de Jiménez.

Además, lamentan que de momento les "atiende un técnico, pero no es la última instancia que decide”. "Todo se cocina en los servicios jurídicos del Ayuntamiento. No somos capaces de sentarnos con los que parece que van a tomar la decisión al respecto. Nos gustaría más concreción", explica Javier Pérez. "Estamos en una incertidumbre", resume Charo Jiménez.

¿Recurrirá el Ayuntamiento la sentencia?

A la reunión de este martes no han podido asistir representantes de las casetas 175 y 177 porque a ellos no les ha llegado sentencia aún, pero sería solo cuestión de tiempo al ser el mismo caso. Han intentado ir como apoyo, pero finalmente no han participado porque tenían "más tiempo" y había "menos riesgo".

Pese a ello, mantienen su fe en que el consistorio defienda sus intereses. El plazo termina el mismo lunes de Feria, el 15 de abril, explican los afectados. “Nosotros estamos 100% con el Ayuntamiento. Creemos y esperamos que vayan al Supremo y que se anule el veredicto", cuenta Alberto Pérez, presidente de la caseta 177, a El Correo de Andalucía.

En el mismo sentido se manifestan desde la caseta 175: "Tenemos la confianza entera en el Ayuntamiento. Que reflexione y recurra, lo esperamos de verdad”.

Existe unanimidad en que la reacción lógica sería que el Ayuntamiento de Sevilla diera un paso adelante, ya que de lo contrario estaría asumiendo haber cometido un error y se generaría una reacción en cadena con una cascada de reclamaciones. "Entendemos que generaría un efecto dominó, porque provocaría la paralización de la lista de adjudicación de casetas”, cuenta Charo Jiménez.

“La única opción que vemos es que el Ayuntamiento recurra la opción al Supremo y gane más tiempo para dar una solución al problema”, opina, por su parte, Javier Pérez (caseta 175). "Si se la acaban dando a la familia Muñoz Noguera sentaría precedente y todo el mundo empezaría a reclamar", asegura Alberto Pérez (caseta 177).

Los afectados actuarían en su defensa

Los perjudicados por la sentencia del TSJA en favor de la familia política de Ana Rosa Quintana creen que están en su derecho de quedarse con la caseta que se les había concedido después de casi 30 años en lista de espera. Por ello, en caso de que el Ayuntamiento decidiera no intervenir, ellos pasarían a la acción.

No nos van a poner en lista de espera. Desde entonces se han dado muchas licencias. Exigiríamos coger el puesto del primero

Alberto Pérez

— Presidente de la caseta Juan Belmonte 177

Sobre todo, lo que argumentan es que durante estos dos años se ha seguido dando licencias a personas que estaban por detrás de ellos en la lista. Y consideran que sería injusto volver a la cola. Se abriría por tanto una puerta a que aumenten las disputas por quién tiene más derecho a tener una caseta. "Entendemos que si se concedió de manera irregular, habría que revertir las concesiones posteriores a la nuestra para darnos una a nosotros, que tenemos más antigüedad", reclama el socio de la 175.

"Nosotros cogimos la nuestra en 2021. Llevamos dos años con ella. Se han dado ocho casetas al año siguiente y luego cinco. ¿Qué pasaría con nosotros? Vamos a un limbo", denuncia Javier Pérez. Y Alberto Pérez se posiciona en la misma línea: "Si nos acaban echando, vamos a tirar para delante con todo. No nos van a poner en lista de espera. Desde entonces se han dado muchas licencias. Exigiríamos coger el puesto del primero".

Toda una inversión en riesgo

No es solo el hecho de tener una caseta, es toda la inversión que hay detrás. "Nos hemos gastado un dinero importante que no serviría para nada. Toda la inversión de miles de euros iría fuera. Llevamos años ilusionados para nada…", lamentan.

No hemos hecho nada. Cuando hay una sentencia se perjudica al que se le atribuye la falta, pero la pagaríamos nosotros

Javier Pérez

— Socio de la caseta Juan Belmonte 175

"Está ya montada y con todo contratado. Nosotros hemos estado 28 años de espera. Hemos disfrutado dos ferias. E igual vemos que tenemos que salir después de este año. Estamos un poco asustados", dicen desde la 175.

Por eso, confían en que la "situación muy anómala" no llegue a ese punto, porque ellos han cumplido con sus "obligaciones". Así lo explica Javier Pérez (175): "Nosotros recurriríamos, porque nosotros no hemos hecho nada, no hemos cometido ninguna infracción. Demandaríamos al Ayuntamiento. La indefensión sería total, por una supuesta mala gestión suya se nos castigaría a nosotros. Cuando hay una sentencia se perjudica al que se le atribuye la falta, pero la pagaríamos nosotros”.

¿Y si la familia Muñoz Noguera quiere ya la caseta? Según cuentan los afectados a El Correo de Andalucía, existe la opción "de solicitar al Tribunal que se ejecute provisionalmente la sentencia. La familia Muñoz ha solicitado disfrutar de la caseta ya este año y dice que la caseta es suya".

Sin embargo, no ven que esa opción sera muy factible porque "no hay nada que ofrecer", es decir, ni a los Muñoz ni a los inquilinos actuales se les podría proponer otra caseta porque "hace falta tiempo" para eso. De hecho, el alcalde de Sevilla informó recientemente de la ampliación del Real pero para 2025, con casi 300 más. En ese supuesto, desde el punto de vista de los perjudicados, "lo primero sería paralizar la ejecución provisional de la sentencia".

"Tengo derecho a mi caseta", reitera Charo Jiménez. Esa es la frase que resume la postura de todos los implicados. El Ayuntamiento tiene 'la patata caliente', es quien debe decidir si recurre o no. Y los afectados siguen en una espera cada vez más tensa a medida que pasan las horas y los días.