Jueves Santo

"Mi padre se tendrá que despedir como nazareno el año que viene": Los Negritos ya mira al 2025

La hermandad, con más de 600 años de historia, deberá esperar al próximo año para volver a realizar su estación de penitencia

Iba a ser un día especial para muchas familias que trasmiten la pasión por sus titulares de generación en generación

Un nazareno de Los Negritos se marcha de la capilla de Nuestra Señora de los Ángeles

Un nazareno de Los Negritos se marcha de la capilla de Nuestra Señora de los Ángeles / Álex Mérida

Rafa Aranda

Rafa Aranda

Dicen que la esperanza es lo último que se pierde. Pero este Jueves Santo, en la calle Recaredo, bastaba con levantar la mirada y observar el cielo para adelantarse y empezar a lamentar la noticia que se anunciaría en torno a las 12:30 horas: "La Junta de Gobierno, reunida en Cabildo de Oficiales Extraordinario, ha acordado por unanimidad suspender la Estación de Penitencia a la S.I.C. ante los partes meteorológicos adversos para las próximas horas en Sevilla".

La historia de la Hermandad de Los Negritos es una historia de caridad, de solidaridad, de lucha por la igualdad. En sus más de 600 años de existencia (la segunda más longeva de la Semana Santa de Sevilla) han vivido de todo, pero cada Jueves Santo es diferente al anterior. Y cada Jueves Santo que se suspende la procesión, el dolor y la tristeza son tan grandes y sentidos como la primera vez. Por más que el cielo (y las predicciones) ya hubieran dictado sentencia desde el amanecer.

Por su antigüedad, la historia de esta hermandad también es una historia de muchísima tradición, que se transmite de generación en generación. Desde los hermanos con más experiencia hasta aquellos más pequeños. Como es el caso de la familia Guerrero, en la que el pesar recorre por las venas de abuelos, padres, madres e hijos.

Antonio y su "Chacho" tendrán que esperar

"Este año era especial, ya que la familia negrita aumenta. Se unía al cuerpo de nazarenos mi primo pequeño, el cual siente el mismo amor por nuestros titulares que le ha inculcado su tío abuelo y tenía la ilusión de realizar estación de penitencia", cuenta María Guerrero, hermana de Los Negritos, a El Correo de Andalucía.

Un estreno que tendrá que esperar al 2025, igual que el adiós de su padre, Rafael Guerrero, que llevaba 24 años como hermano: "El año que viene, si salud se lo permite, hará estación de penitencia para poder despedirse como nazareno. Pero tiene claro que nunca de su hermandad mientras la vida se lo permita".

La familia Guerrero, hermanos de Los Negritos

La familia Guerrero, hermanos de Los Negritos / Cedida por María Guerrero

La lluvia no ha permitido lo que iba a ser la unión de tres generaciones en la capilla de Nuestra Señora de Los Ángeles. "Mi primo, Antonio, quería poder estrenarse como nazareno y su "Chacho", como él lo llama, iba a despedirse, ya que por su edad y condición física se le hace cada año más dura la estación de penitencia". "Estamos seguros de que el año que viene será y que juntos podremos acompañar a la Virgen de los Ángeles, mi primo en el primer tramo, y mi padre, en el último", afirma, esperanzada, María.

"Mi niño de tres meses iba a salir con mi túnica"

"El año que viene ya irá dando sus pasitos y recorriendo los tramos del Stmo. Cristo de la Fundación", lamenta Víctor Jiménez, hermano de Los Negritos. Cuenta a El Correo de Andalucía que su hijo, de tres meses, iba a salir por primera vez como monaguillo: "Nos hacía mucha ilusión, ya que iba a salir con mi túnica y todas las cositas que tenía yo de cuando era chico".

"El día de hoy en mi familia es de ilusión, de emociones. Todos somos hermanos de cuna y es muy especial para nosotros. El niño es la tercera generación", explica. Su padre es mayordomo 1° de la hermandad, y su hijo iba seguir el mismo camino familiar.

La familia Jiménez, hermanos de Los Negritos, hace 15 años

La familia Jiménez, hermanos de Los Negritos, hace 15 años / Cedida por Víctor Jiménez

631 años con alguna desilusión

La Hermandad de Los Negritos es, tras El Silencio, la que tiene un mayor recorrido en Sevilla. Fue el cardenal Gonzalo de Mena el que fundó, a finales del Siglo XIV, una hermandad en el hospital de Los Ángeles para atender a personas de raza negra. Por aquel entonces los negros esclavos que se traían a Europa desde África subsahariana llegaron a alcanzar más del 12% en Sevilla. Y en torno al año 1393, se abrió el hospital para atenderlos, desembocando en la primera hermandad de negros de la historia.

La Virgen de los Ángeles, en la capilla de Nuestra Señora de los Ángeles

La Virgen de los Ángeles, en la capilla de Nuestra Señora de los Ángeles / Álex Mérida

"Se ha convertido en una hermandad de unión entre las distintas nacionalidades que hoy en día habitan en nuestra ciudad. Resulta llamativo el gran numero de personas de color que pertenecen a nuestra hermandad, y aún más relevante, el elevado número de pequeños con rasgos asiáticos que cada año forman parte del cortejo", cuenta María Guerrero.

Desde entonces, en la historia reciente, no han sido muchas las veces que no se ha realizado la estación de penitencia, aunque desde Los Negritos se entiende la decisión tomada este año. "Los mayores de la casa la han visto muy acertada ya que hace 26 años se vivió una estampa muy fea ya, nos cogió la lluvia en la calle", cuenta Jiménez.

El Cristo de la Fundación, en la capilla de Nuestra Señora de los Ángeles

El Cristo de la Fundación, en la capilla de Nuestra Señora de los Ángeles / Álex Mérida

"Siempre hay que tomar en consideración el patrimonio tanto artístico como personal. Además, contamos con uno de los palios y manto de alto valor artístico y patrimonial. Es la decisión más adecuada", afirma Guerrero.

"Nos hemos levantado con el corazón en Recaredo", confiesa esta hermana de Los Negritos, un corazón que seguirá latiendo 365 días más hasta que las puertas de la capilla de Nuestra Señora de Los Ángeles se abran de nuevo y el Cristo de la Fundación y la Virgen de los Ángeles puedan al fin recorrer las calles de Sevilla.